En las últimas dos décadas, la gestión logística ha ido ganando en complejidad, circunstancia que obliga a centralizar la información que se genera para intentar mejorar una rentabilidad amenazada.
El proceso de globalización de la producción industrial ha obligado a incorporar nuevos actores que permitan ofrecer una gestión adecuada de cadenas de suministro más alargadas.
Y, aunque parece que con la crisis sanitaria este proceso está en cuestión, lo cierto es que la gestión de la cadena de suministro sigue teniendo un alto grado de complejidad.
En este sentido, los profesionales logísticos y de transporte manejan múltiples fuentes de información que aportan datos de diversas procedencias y con formatos distintos. Ponerlos todos en orden es un primer reto al que sigue la necesidad de compaginarlos, ordenarlos y combinarlos para que ofrezcan indicadores de rendimiento y situación adecuados.
Este proceso solo puede conseguirse por medio de las nuevas tecnologías, dada la dispersión de fuentes documentales y la ingente cantidad de datos que pueden recogerse en toda la cadena de suministro.
Hacia la torre de control (‘control tower’) centralizando la información
Así pues, la primera tarea de las nuevas tecnologías radica en centralizar toda la información y hacer de auténtica torre de control. De esta manera servirá de atalaya para recopilar absolutamente todos los datos que puedan proporcionar indicadores de gestión.
Sin embargo, el papel de las nuevas tecnologías no acaba aquí, sino que va más allá. En este sentido, el concepto de torre de control o ‘control tower’ engloba toda una serie de características, entre las que se encuentran:
- Una torre de control permite gestionar de manera integral una operativa de la cadena de suministro.
- La torre de control no solo se limita a ofrecer una visibilidad completa de una actividad, sino que, además, permite dinamizar medidas correctoras.
- Cualquier operativa de la cadena de suministro tiene implicaciones financieras para la empresa y sobre el servicio que se ofrece al cliente, por lo que cualquier torre de control debe tener en cuenta también ambos factores.
- La torre de control debe anticiparse a posibles escenarios adversos y ser capaz de elaborar diferentes escenarios para una planificación adecuada.
- La torre de control debe ser un escenario abierto a la colaboración de todos los actores que integran la cadena de suministro y que, como tales, pueden aportar elementos de gran interés.
- La torre de control es un elemento dinámico que evoluciona constantemente, como lo hace la propia gestión de la cadena de suministro para adaptarse con agilidad a cualquier cambio o situación inesperada.
A la recogida de información que se hace a lo largo de la cadena de suministro ha de sucederle todo un trabajo de investigación y desarrollo para que los datos en bruto se canalicen a través de programas que permitan ofrecer información ordenada, coherente y pertinente.
Para ello es fundamental contar con plataformas capaces de interpretar todo el flujo de información a gran velocidad y de una manera que sea la adecuada para la gestión logística.
Solo con programas específicos podrán generarse indicadores de gestión concretos y adecuados para cada eslabón de la cadena de suministro, incluyendo un elemento tan esencial como el transporte.
Muchos de estos indicadores hacen referencia a la operativa, mientras que otros están relacionados con el negocio logístico y también deben ser tenidos en cuenta, aunque suelen dejarse a un lado.
Para ello es fundamental un trabajo codo a codo de las empresas tecnológicas y los operadores para diseñar un flujo de información adaptado a la necesidad de cada empresa.
Finalmente, el desarrollo deberá ofrecer una información en un panel centralizado, con un formato comprensible y una visualización sencilla. Con información centralizada se consigue obtener una visión integral de los procesos logísticos y de transporte.
Al mismo tiempo, una visualización lo más sencilla posible de todos los indicadores facilita la gestión de cualquier incidencia y la toma de medidas correctivas para corregir cualquier desvío de la cadena.
Para garantizar que las medidas correctoras tienen efecto, la información debe centralizarse, tratarse y ofrecerse en indicadores visuales a tiempo real.
FIELDEAS Track and Trace, el todo en uno para el control de la cadena
Existen múltiples programas y plataformas que ofrecen una gestión parcial de los diferentes eslabones de la cadena de suministro, incluido el transporte. También existen otros softwares que realizan una gestión integral a tiempo real.
Sin embargo, solo FIELDEAS Track&Trace ofrece una gestión total de la cadena de transporte a tiempo real desde una perspectiva de negocio.
Para ello, utiliza indicadores de gestión relacionados con las diferentes operativas que componen la cadena de transporte e incorpora otros datos relacionados con la gestión del negocio, con lo que se convierte en un software de visibilidad único en su especie.
Solo integrando indicadores de gestión de la operativa con indicadores de negocio puede alcanzarse un nivel en el que la tecnología ayude a alcanzar una mayor rentabilidad a las empresas en momentos de dura crisis internacional.
De esta manera, FIELDEAS Track&Trace ofrece una ventaja competitiva a las empresas de transporte y los operadores al dotarles de una tecnología capaz de aportar indicadores de alto valor para sus clientes.
De igual modo, el software también permite amoldar la gestión de equipos y personal a las necesidades de cada actividad para ayudar en la reducción de costes y permitir una mejora de la rentabilidad empresarial, todo ello gracias el hecho de poder centralizar la información con la ayuda de las nuevas tecnologías como FIELDEAS Track&Trace, una gran solución para la gestión de las empresas de transporte.