La gestión de los muelles de carga y descarga en almacenes y plataformas logísticas es un punto crítico en la cadena de suministro.
De la eficacia y fiabilidad de estas labores depende que las cadenas funcionen como engranajes perfectos para conseguir colocar los productos en sus mercados de destino en tiempo y forma.
Sin embargo, la participación de diferentes actores en estas tareas provoca fricciones que, en muchos casos, necesitan herramientas tecnológicas que permitan engrasar los procesos.
Además, en los últimos meses, diversos cambios legislativos han venido a modificar el esquema tradicional con que se llevaban a cabo las tareas de carga y descarga de los camiones en almacenes y plataformas logísticas.
En un escenario de falta de oferta de transporte y de escasez de conductores, el transporte juega un papel crítico en la cadena. Mantener los camiones funcionando al máximo y con la mayor cantidad de carga posible es crucial.
La realización de las labores de carga y descarga ha sido una labor que por costumbre se había asignado a los conductores. Sin embargo, estos profesionales consideraban que estos trabajos no debían ser responsabilidad suya.
Desde el pasado mes de septiembre, los conductores profesionales tienen prohibido realizar labores de carga y descarga, salvo en ciertas excepciones.
En concreto, desde primeros de septiembre omitir la prohibición de la carga y descarga por los conductores constituye una infracción muy grave tipificada en la Ley de Ordenación de los Transportes Terrestres (LOTT).
Como consecuencia, ahora la responsabilidad de estas labores corresponde a las empresas que gestionan los almacenes y centros logísticos en que se cargan y descargan los camiones.
En concreto, la LOTT responsabiliza de las infracciones en la realización de las operaciones de la carga y descarga a la empresa bajo cuya dirección actúe el conductor del vehículo, así como como al cargador, expedidor, intermediario y destinatario que hubieran intervenido en el transporte
La situación obliga a estas compañías a tener que tomar el control para organizar los flujos de entrada y salida de mercancía de sus instalaciones con el fin de garantizar que los flujos dentro de los almacenes son los adecuados y que se garantiza la circulación de camiones con fluidez para evitar cualquier riesgo de colapso y que se produzcan paralizaciones de vehículos que generan costes e ineficiencias logísticas.
En este mismo sentido, otro de los principales problemas que existen en la gestión de muelles y de campas en almacenes y plataformas logísticas tiene que ver con las esperas que están obligados a realizar los camiones.
Estos momentos supone tiempos muertos en los que ni los vehículos ni los conductores están generando ingresos y en los que, además, se acumulan retrasos para acudir a cubrir otros servicios.
Por estos motivos, los transportistas venían reclamando medidas para reducir estos tiempos perdidos.
Al tiempo, las esperas también generan problemas para los clientes del transporte, ya que generan acumulaciones de vehículos que obstruyen los muelles y obligan a gestionar los espacios de aparcamiento en las campas y, además, ralentizan el movimiento de los conjuntos en las salidas y las entradas.
Las autoridades estiman que las paralizaciones tienen un impacto muy significativo en el funcionamiento de la cadena logística, por lo que han pretendido incentivar su reducción para reducir los tiempos del transporte, las horas no productivas de los trabajadores y, en definitiva, de los costes.
Así pues, la LOTT contempla que cuando el vehículo haya de esperar un plazo superior a una hora hasta que se concluya su carga o descarga, el transportista podrá exigir al cargador una indemnización en concepto de paralización, que dará lugar a una indemnización.
Sin embargo, esta situación no interesa ni a los cargadores, por el incremento de costes que supone, ni a los propios transportistas, que están centrados en que camiones y conductores estén circulando cuanto más tiempo mejor para generar ingresos.
Este panorama complejo es adecuado para la aplicación de herramientas tecnológicas que tengan en cuenta múltiples variables para ofrecer soluciones a problemas complejos y que también impulsen la colaboración en la cadena logística.
En concreto, el uso de las nuevas tecnologías para gestionar la operativa de carga y descarga en muelles de almacenes y plataformas logísticas permite:
Cadenas de suministro más dinámicas, al agilizar las labores de carga y descarga, estableciendo el mejor orden posible y aprovechando los espacios para dar más fluidez a las salidas y entradas de vehículos
FIELDEAS ha desarrollado un módulo específico para gestionar muelles de carga y descarga y campas en almacenes y plataformas logísticas dentro de su herramienta de visibilidad en la cadena de suministro FIELDEAS Track and Trace.
Esta herramienta conecta de forma directa a todos los actores de la cadena en tiempo real. De esta manera se generan escenarios de optimización que se benefician de trámites más rápidos, mayor eficiencia y una mejor capacidad para reaccionar ante cualquier posible incidencia facilitando la colaboración entre todos los actores de la cadena.
El sistema ofrece capacidades avanzadas entre las que destacan:
Optimiza la gestión de los muelles de carga y descarga e Impulsa la productividad de tus operaciones de transporte.
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