Cuellos de botella en la cadena de suministro

Desde hace ya largos meses las cadenas de suministro se están viendo sometidas a una gran presión. Las alteraciones que vive el comercio mundial se traducen en cuellos de botella que impiden el normal funcionamiento de los flujos logísticos.

Diversos sucesos han coincidido a lo largo del último año y medio, dando lugar a una situación ciertamente anómala que dificulta el normal abastecimiento de empresas y mercados.

Cuellos de botella en la cadena de suministro internacional

En primer lugar, la crisis sanitaria y después el atasco del ‘Ever Given’ en el Canal de Suez han iniciado un proceso que, posteriormente, ha ido alterando el funcionamiento de diversas plantas de producción en diferentes partes del planeta.

A su vez, todo ello ha ido alterando los flujos de contenedores, con lo que ha faltado capacidad para mover mercancía, alimentando una espiral endiablada que ha extendido las difíciles condiciones logísticas por todo el globo.

Mientras, la crisis sanitaria también ha generado una alta demanda de algunos productos, especialmente de alimentación, electrónica y diferentes productos del hogar, con un aumento en paralelo de las ventas a través del canal on-line.

Finalmente, el proceso ha provocado toda una compleja alteración de los precios de diversas materias primas, de la energía y, finalmente, de productos intermedios como los chips electrónicos, como consecuencia de una fuerte demanda y una escasez de oferta.

De este modo se ha generado una espiral inflacionista que pone en riesgo la salida de la crisis y la recuperación económica a nivel mundial.

En definitiva, en el último año y medio se ha producido todo un dominó de circunstancias que ha dado lugar a una crisis de suministro de escala global.

En el sector suele decirse que la logística siempre pasa desapercibida, hasta que alguna circunstancia hace que los flujos dejen de funcionar normalmente y, entonces, la sociedad toma conciencia de todo el entramado que permite funcionar todas las complejas relaciones que mueven la economía del planeta.

Así pues, todos los esfuerzos de los profesionales del sector se dirigen a recuperar la normalidad perdida, en un entorno en el que las cadenas de suministro están evolucionando para cubrir un doble objetivo: ganar resiliencia y agilidad.

Por qué la visibilidad en la cadena de suministro es tan importante ahora mismo

En este contexto urgen soluciones con las que la situación pueda volver a la normalidad y retomar el equilibrio que permita el normal funcionamiento de unas cadenas de suministro que cada vez son más complejas y están más globalizadas.

Precisamente este rasgo de complejidad y globalización de las cadenas logísticas hace imprescindible el uso de soluciones tecnológicas para devolver cada pieza del puzzle a su lugar correcto.

Con ello se pretende que los flujos retomen su normalidad perdida hace más de un año y medio, algo crucial para la evolución económica de los próximos meses.

En concreto, para ello es necesario, en primer lugar, tener una visibilidad completa de toda la cadena, sin puntos ciegos, e instantánea.

Esto es especialmente crítico en un momento como el actual, en el que se acerca el período de mayor volumen de compras de todo el año, primero con el ‘Black Friday’ a finales de noviembre, después con la campaña navideña y de Reyes y, finalmente, con las rebajas de enero.

Para ello es esencial contar con herramientas como FIELDEAS Track and Trace, que permiten una visibilidad total de la cadena de suministro en tiempo real.

FIELDEAS Track and Trace ofrece visibilidad y control desde el origen hasta la entrega final, a través de la monitorización de información clave en tiempo real.

Con ello se consigue mejorar la gestión y trazabilidad de los pedidos, garantizando las entregas de forma eficiente y sostenible, al tiempo que se optimiza la gestión de tu flota y mejora la relación con los clientes a través de un modelo de logística hiperconectada.

Sistemas como FIELDEAS Track and Trace permiten un seguimiento continuo de las diversas fases del transporte y permiten tomar medidas correctoras para permitir que los productos lleguen a sus destinos justo cuando se necesitan. Sobre todo ahora, que es cuando Papá Noel o los Reyes Magos no pueden esperar.

Sin embargo, las ventajas de FIELDEAS Track and Trace frente a otros sistemas de trazabilidad se centran en su concepción integral que le permite organizar la visibilidad con una visión de negocio y, además, su potente capacidad de integración, que le facilita alinear el funcionamiento de cualquier cadena de suministro, por compleja e internacionalizada que esté.

En este sentido, las herramientas de visibilidad permiten responder con agilidad a un entorno cambiante y dominado por una gran incertidumbre. Ver lo que pasa en todos los eslabones de la cadena ayuda de manera decisiva a adaptar medios, equipos y personal para conseguir un funcionamiento lo más fluido posible de las actividades logísticas.

De este modo se consigue el segundo objetivo, el de la resiliencia: Aquellas cadenas de suministro que hagan un mejor uso de las tecnologías de visibilidad estarán en mejores condiciones para poner sus productos a disposición de los consumidores precisamente en uno de los momentos en que mayor demanda existe.

Solo las cadenas de suministro resilientes, capaces de mantener su actividad contra viento y marea, en cualquier circunstancia, por adversa que sea, y ágiles, que pueden responder a eventos inesperados y establecer vías de abastecimiento alternativas, serán las estarán en mejores condiciones para sobrevivir a un momento extraordinariamente desafiante.